Cuando supe de la existencia de Samplitude hace ya bastantes años atrás, comencé con la versión 5. (Hoy vamos en la 9)
La imagen que tuve del software, fue de expectación, por cuanto en el papel ofrecía muchas características novedosas para la época. Se mostraba potente y desafiante. No requería gran cantidad de recursos de hardware, - eso si, pensando en un sistema racional en cuanto a la composición musical -. La idea de esta compañía fue crear un sistema de grabación integral para las necesidades de los ingenieros en los estudios de grabación. Sus inicios fueron auspiciosos, ya que en la época los lideres absolutos de los secuenciadores, era la compañía Steinberg y Logic.
Magix se había propuesto apuntar a lo más alto de la sofisticación y calidad. Sí, lo consiguió.

Samplitude Pro se manifiesta como una estación de audio digital exclusivamente para sistemas basados en Windows. Posee todos los elementos para iniciar una grabación y finalizar con la masterización del CD, sin necesitar de otras herramientas para llevar a cabo la tarea.
Las nuevas funciones le ofrecen al usuario todo lo necesario para grabar, editar y mezclar sus pistas. Los nuevos plug-ins y editores permiten llevar adelante tareas que otros programas no pueden realizar, debiendo recurrir necesariamente a otros programas o a plug-ins de otras compañías. Magix, ha dotado a Samplitude Pro de todo lo necesario para que el músico dueño de un estudio casero se dedique a producir su música, sin preocupaciones originadas debido a la falta de una determinada herramienta.


Samplitude me llamó la atención desde un primer momento, su facilidad de operación son francamente notables. Posee un manual de usuario de tan sólo 263 páginas impresas en papel, aunque también - obviamente - en formato pdf. Ese número comparado con los manuales de sus competidores – de más de 700 páginas –, seguramente quiere decir algo.
Sobre la parte inferior de la pantalla, el menú Workspace permite adaptar la ventana de trabajo de acuerdo a la opción elegida: Recording; Editing; CD Mastering; etc., visualizando en cada caso las herramientas necesarias para las diferentes tareas, optimizando de esta manera, el espacio de la pantalla. En mi caso elegí Recording.
Dentro de la misma sección, una serie de botones permiten el acceso al editor de objetos – ver la sección Objetos –, al mezclador, al administrador de archivos, y a la ventana de Transporte.
En un par de minutos pude empezar a grabar un proyecto – un archivo VIP – compuesto por pistas de audio, MIDI e instrumentos virtuales.
Una característica destacable es que cada pista del programa puede utilizarse para grabar audio o MIDI indistintamente. El usuario indica, presionando el botón AIDI en la cabecera de cada pista, si la pista se utilizará para grabar información MIDI; si no se presiona el botón la pista grabará audio de acuerdo a las asignaciones de entrada. De la misma manera, el botón PL, se emplea para desplegar la lista de plug-ins VST y DirectX que se pueden insertar en la pista.
Presionando el botón secundario del mouse sobre los botones Play y/o Record de la barra de Transporte, se accede a las opciones de reproducción y de grabación donde se puede optar por el formato de audio que se utilizará para grabar las diferentes pistas que formarán parte del proyecto. El programa puede trabajar con todos los formatos de audio esperados, incluso formatos con algoritmos de compresión como el nunca bien ponderado MP3, por ejemplo.
Samplitude tiene asignación de ruteo de señal totalmente configurable por el usuario. El botón FX abre una ventana desde la que se puede cambiar el orden de las diferentes etapas por las que atraviesa la señal que ingresa a cada pista; dicho sea de paso, cada pista posee sus propias asignaciones.
Durante la grabación de mi primer proyecto en este software, éste se comporto impresionantemente estable, casi no lo podía creer. Lo destacable es puedes tener muchas pistas de audio, midi, vsti, plugins, y sigue corriendo como la seda. Impresionante.

Sin lugar a dudas, es que debes poseer una tarjeta de audio con driver ASIO en forma nativa.

El mezclador de Samplitude continúa con la idea de diseño de la pantalla de pistas. Sus secciones son muy claras, y resulta sencillo entender su funcionamiento aún sin recurrir al manual.
Tuve un momento de confusión al no poder encontrar cómo agregar efectos a un canal auxiliar. Pensé que debía insertarlos en la sección AUX. Mirando mejor el mezclador observé que cada envío auxiliar estaba conectado a una pista del mezclador, como cualquiera de las otras utilizadas para controlar la señal de cada instrumento. Utilizando el botón PL de las pistas AUX pude colocar los efectos que necesitaba, y desde la sección AUX, ajustar la cantidad de señal enviada a ese bus.
Cada canal posee controles de ajuste de ganancia; de envíos auxiliares; puntos de inserción; delay/reverb; EQ paramétrico; control de panorama, además del fader de volumen, los botones de Solo, silencio y las asignaciones de ruteo de señal.
Es para destacar el diseño de la sección Master que cuenta, entre otras cosas con una serie plug-ins especialmente útiles en esta etapa, tales como De-esser, EQ; compresores/limitadores; simulaciones de amplificadores y de sala. En caso de considerarlo necesario, el usuario puede desactivar estos efectos e insertar sus plug-ins favoritos.
Resulta de mucha ayuda, especialmente en mezclas de proyectos de grandes dimensiones, utilizar la última columna del mezclador desde donde se administran las visualizaciones de las diferentes secciones de los canales, además de poder almacenar “fotografías” de las asignaciones en un determinado momento; guardar configuraciones de canales y ruteo de señal, y de restablecer a sus asignaciones iniciales los controles de EQ, envíos auxiliares; etc.

Algo que distingue a Samplitude de sus competidores es la edición basada en objetos. Un objeto es un contenedor de un archivo de audio o de una parte del mismo. Es equivalente a un clip de SONAR o un evento o parte en CUBASE SX.
Lo novedoso es que Samplitude permite procesar cada objeto de manera independiente, con diferentes efectos y controles de ecualización, entre otras cosas. Otros programas permiten insertar un determinado plug-in que afecta a todos los eventos, partes o clips que integran una pista; en Samplitude cada objeto de una misma pista puede tener sus propias asignaciones de efectos, ecualización, de envíos auxiliares, sólo por mencionar algunos aspectos. Una verdadera muestra de la potencia del programa.
Por supuesto, todos los efectos se procesan en tiempo real, lo que significa que el archivo de audio desde donde el objeto obtiene su contenido, no se ve modificado.
Samplitude dispone de un editor de objetos donde se realizan todos los procesos. El editor se abre automáticamente haciendo doble clic en la parte inferior de un objeto, o bien presionando el botón Object Editor ubicado en la barra que se encuentra en la parte inferior de la pantalla.
Como es de esperar, cada objeto presenta manejadores con los que el usuario puede ajustar las líneas de volumen, modificar la extensión del objeto, panorama, y/o fades, sin necesidad de abrir el editor.
De ser necesario, también se pueden aplicar procesos directamente sobre el archivo de audio grabado, teniendo en cuenta que tales tareas son de carácter destructivo. Para realizar llevar a cabo esta tarea se debe presionar el botón derecho del mouse sobre un objeto y elegir entre todas las posibilidades, el comando Wave Editing....
Samplitude no sólo trabaja con objetos de audio sino también con objetos MIDI. Editando un objeto MIDI, el usuario puede modificar, además del volumen y los puntos de inicio y final, el comportamiento de los mensajes de controladores continuos, la cuantización, el canal de salida, entre otros parámetros.
Por otra parte, el programa también posee un editor MIDI que presenta el típico aspecto “piano roll”, desde donde se pueden dibujar curvas de controladores, editar notas gráficamente o mediante el editor de lista, en donde se pueden seleccionar todos los eventos en forma individual. Nadie tendrá problemas para poder trabajar con el editor MIDI ya que su manejo es totalmente intuitivo.

Elastic Audio es otra de las nuevas funciones. Este editor permite al usuario modificar la afinación de archivos de audio de líneas melódicas – una voz –, aunque también puede trabajar sobre archivos con más una voz. El objetivo es el mismo que se persigue con otros programas de afinación de melodías, aunque aquí podemos aplicar automatización de las curvas de afinación logrando cambios en tiempo real. Además, los cambios pueden aplicarse en forma automática o manual.
Elastic Audio posee dos modos de trabajo Relative y Direct. Con el primero podemos tomar la línea que marca la afinación original y desplazarla para cambiar la altura tonal de un archivo o modificarla trazando nuevos tramos de curva para crear modificaciones de afinación programadas.
Bajo el modo Direct se necesita realizar un reconocimiento del archivo para que Samplitude pueda determinar la afinación original. Al finalizar el análisis – iniciado al presionar el botón Detection – el archivo aparece fraccionado de acuerdo a las notas detectadas. Luego, el usuario puede aplicar modificaciones a notas individuales, en forma manual o automática. Por supuesto, este modo permite obtener los mejores resultados cuando se trabaja con archivos de una sola voz.
Desde las opciones que se encuentran en el panel de la izquierda de la ventana del editor, el usuario puede elegir entre cinco modos de escala para reposicionar los eventos detectados: Major; Minor; Harmonic minor; Pentatonic; Chromatic.
Gracias a las diversas herramientas y las posibilidades de cuantización los cambios de afinación se pueden controlar con total precisión, sin que eso signifique dificultades.
Es bueno mencionar que en caso de sentir que hemos perdido el rumbo, el botón Reset anula cualquier modificación volviendo la afinación a los valores iniciales de grabación.
Una buena manera de comprobar el funcionamiento es detectando, por ejemplo, una pista vocal y elegir otro modo melódico; presionando luego el botón Tune de Pitch Contour. Modificando la posición de la rueda Contour Smooth se suavizan los ajustes, evitando el espantoso “efecto Cher”.

AM representa Analogue Modelling. Es un paquete compuesto por dos procesadores denominados am-track y am-pulse que aplicar procesamiento dinámico modelando el desempeño de los procesadores clásicos.
Am-track es un compresor que además aplica simulación de cinta – Tape simulation. El compresor opera de dos modos: VCA y Vintage. En el primero encontramos los habituales parámetros de un compresor: ratio; threshold; attack; release; mientras que el modo Vintage posee una gran rueda denominada Drive, que al girarla hacia la derecha aumenta la cantidad de compresión, junto con dos ruedas que ajustan Attack y Release.
El botón Expert abre un panel con parámetros que modifican el comportamiento del compresor y de la simulación de cinta. Allí encontramos, entre otros, una rueda que ajusta la frecuencia de un filtro pasa altos con el objetivo de concentrar la compresión en una determinada área del espectro de audio. También, empleando dos botones el usuario puede elegir aplicar compensación de nivel de salida automático, y también utilizar una compensación semi-automática del parámetro Release, basada en la asignación realizada por el usuario.
La sección Tape simulation emula el comportamiento de los efectos de una cinta cuando se la utiliza para grabar, buscando de esta manera, contrarrestar, la “frialdad” del medio digital y ganar la calidez de sonido que se crea al emplear cinta. La gran rueda Level ajusta la intensidad del efecto, acompañada de otras dos ruedas que ajustan ecualización y control Bias empleado en los grabadores de cinta.
Am-pulse se utiliza para modificar en tiempo real la envolvente de volumen de un sonido, alterando el tiempo de ataque y nivel de sostenimiento, y además, aplicando saturación y ecualización.
Este procesador es excelente para aplicarlo en pistas de baterías, ya que permite modificar la respuesta dinámica de cada cuerpo. Por ejemplo, ajustando la sección Sustain podemos incrementar el volumen del ambiente, mientras que al mismo tiempo, ajustamos los controles deslizables de la sección Attack para acortar o estirar los tiempos de impacto.
También puede resultar muy creativo aplicar am-pulse en acordes de guitarras: estirando los tiempos de ataque e incrementando el nivel de sostenimiento, es posible crear texturas similares a pads, muy útiles para sostener partes de una canción.
El sonido de ambos procesadores es excelente y se convierten en herramientas indispensables en el momento de mezclar una producción.

Desde esta versión, Samplitude puede crear proyectos con sonido envolvente. Un sistema de mezcla Surround necesita, además de los canales, efectos que puedan procesar la información de manera paralela para cada canal del sistema. Es así que ahora el usuario puede crear y mezclar proyectos Surround con todos los recursos necesarios para llevar a cabo la tarea.
El usuario dispone de ecualizaciones, herramientas de procesamiento dinámico, y simulación de sala de tipo “convolution”, que se basa en la respuesta acústica de un determinado recinto; todos preparados para operar en proyectos Surround.
Cada objeto de un proyecto puede colocar en cualquiera de los múltiples canales del sistema con la misma facilidad que se lo hace al trabajar con un proyecto estéreo. Por supuesto, aplicando las herramientas de panorama se pueden realizar cambios en tiempo real logrando efectos impresionantes.

Sin lugar a dudas, Samplitude Pro es un excelente software que reúne todos los elementos necesarios para realizar una producción de audio. La facilidad de operación que propone y su potencia de edición, basada principalmente en el procesamiento de los objetos de audio y en el gran rendimiento en la utilización del CPU, lo convierten, indudablemente, en una de las grandes estaciones de audio digital.
No quiero dejar de mencionar los nuevos administradores de archivos, marcadores, pistas y objetos desde donde pueden realizarse diversas operaciones que facilitan la manipulación de estos elementos. El botón Manager, ubicado en la barra de botones inferior, permite el acceso para gestionar la información.
Robota Pro es una emulación de máquina de ritmos con sonidos analógicos, de ocho voces, con un secuenciador interno incorporado para crear patrones rítmicos.
Remix agent es una utilidad similar a la implementada en varios programas competidores. Su trabajo consiste en crear porciones de audio cuya separación se basa en los pulsos rítmicos de la señal grabada. Un asistente guía al usuario en los pasos necesarios para la correcta determinación del tempo, para luego fraccionar el objeto inicial en la cantidad de partes necesarias, que luego se pueden manipular de diversas maneras; por ejemplo, para crear loops; modificar la posición original de algún sector; reacomodar los nuevos objetos en diferentes lugares del compás. Por supuesto, los mejores resultados se obtienen con archivos con picos rítmicos bien definidos.
Un correcto sistema de ayuda brinda al usuario comentarios precisos con sólo posicionar el mouse sobre cualquier herramienta u objeto sobre la pantalla. Con pocas palabras, Samplitude indica claramente la utilidad que posee el elemento señalado, y además, métodos de selección para aplicar ciertas tareas de edición.
Desde la grabación de la primera pista de la primera canción hasta la masterización del CD completo, Samplitude Pro se confirma como una de las mejores estaciones de trabajo para la producción integral de un proyecto de audio.
Contrariamente a lo que alguien podría suponer, no es necesario contar con un gran equipo para correr Samplitude. Los sistemas operativos van desde Windows 95 hasta Windows XP. De acuerdo al sistema utilizado, lo requerimientos de RAM varían desde 128 Mb hasta 512 Mb. Un procesador de iv MHz permite un uso intensivo del programa. Además del lugar en el disco duro – 250 Mb como mínimo – se necesita disponer de un puerto USB para conectar el Dongle que almacena la autorización para el funcionamiento del programa.